Papel para envolver alimentos: exigencias del sector alimentario
La industria alimentaria exige que los materiales en contacto con los alimentos no solo cumplan con las normativas europeas, como el Reglamento (CE) n.º 1935/2004, sino que también respondan a estándares específicos según el país, el canal de distribución o el tipo de alimento. En este marco, el papel para envolver alimentos debe demostrar:
- Inocuidad química: sin migración de sustancias nocivas al alimento.
- Resistencia mecánica: tolerancia al rasgado, al agua o a la grasa, dependiendo del uso final.
- Adecuada composición: uso de fibras vírgenes o recicladas seguras, libres de contaminantes.
- Compatibilidad con procesos industriales: impresión, termosellado, laminado, corte y manipulación automática.
Este nivel de exigencia requiere procesos altamente controlados, auditorías periódicas y tecnologías adaptadas a las particularidades del papel técnico alimentario.
Controles de calidad en la producción del papel alimentario
El proceso de fabricación del papel para envolver alimentos integra múltiples etapas sometidas a control. El objetivo es asegurar una calidad constante, trazabilidad completa y pleno cumplimiento normativo. Estos controles pueden agruparse en tres grandes bloques:
Control de materias primas
Desde el inicio del proceso se trabaja con celulosa segura y rastreable. En Arrosi, seleccionamos fibras de alta pureza, tanto vírgenes como recicladas, priorizando proveedores certificados y con garantías de seguridad alimentaria. En el caso de papeles reciclados, se utilizan procesos de limpieza reforzados, desentintado y descontaminación para asegurar su idoneidad.
Vigilancia del proceso de fabricación
Durante la producción se monitorizan múltiples variables:
- Gramaje, espesor y estructura de la hoja
- Ausencia de impurezas visibles o inhomogeneidades
- Estabilidad de la coloración (cuando se emplean tintas seguras)
- Ensayos de migración específica y global
- Permeabilidad al vapor de agua, grasas o humedad
Las plantas deben cumplir con sistemas de gestión como ISO 22000, BRCGS Packaging Materials o ISO 9001, que aseguran condiciones higiénicas y estandarizadas en toda la cadena de valor.
Ensayos sobre el producto final
Una vez terminado, el papel para envolver alimentos se somete a pruebas que confirman su comportamiento técnico:
- Neutralidad organoléptica (sin olores ni sabores añadidos)
- Resistencia al contacto con alimentos húmedos, grasos o calientes
- Comprobación de defectos visuales, fallos estructurales o inconsistencias de impresión
- Control de cada lote mediante sistemas de trazabilidad documental
Estos controles permiten una respuesta rápida en caso de auditorías externas, devoluciones o controles sanitarios.
Certificaciones clave para el papel para envolver alimentos
Las certificaciones son fundamentales para garantizar la seguridad, legalidad y confianza del papel alimentario. Las más relevantes son:
Declaración de conformidad alimentaria
Todo papel apto para contacto con alimentos debe acompañarse de una declaración de conformidad, en la que el fabricante acredita que el producto cumple con la legislación vigente (como el Reglamento 1935/2004) y especifica sus condiciones de uso.
Certificación FSC® o PEFC™
En los papeles de fibra virgen, la certificación de origen sostenible es indispensable. Tanto FSC® como PEFC™ aseguran que la materia prima proviene de bosques gestionados de forma responsable, lo cual se alinea con los compromisos de sostenibilidad de la industria.
Sistemas de gestión certificados
Sistemas como ISO 22000 (seguridad alimentaria), ISO 9001 (calidad) o BRCGS Packaging Materials refuerzan la credibilidad del proveedor ante marcas, distribuidores y organismos reguladores.
Trazabilidad y personalización del papel alimentario
En el entorno actual, la trazabilidad es tan importante como la resistencia física del material. Cada resma, bobina o pliego debe estar identificado con un lote, una fecha de fabricación y un proveedor de fibras. Esto facilita auditorías, controles sanitarios y acciones correctivas.
Además, el papel para envolver alimentos debe poder adaptarse a distintos requisitos técnicos. Arrosi ofrece soluciones a medida que combinan:
- Barreras a grasas, vapor o humedad
- Aptitud para el contacto directo o indirecto con alimentos
- Compatibilidad con procesos de termosellado o impresión
- Formatos según maquinaria y línea de producción del cliente
En este sentido, el papel antigrasa es una solución muy solicitada por su versatilidad en la envoltura de quesos, embutidos, bollería y comidas preparadas. Puedes profundizar en este tipo de papel consultando nuestro artículo: Papel antigrasa: aliado en la presentación de alimentos.
El papel como alternativa sostenible al plástico
Además de cumplir con estándares técnicos y legales, el papel alimentario representa una alternativa sostenible frente a materiales sintéticos. Es reciclable, biodegradable y percibido por el consumidor como una opción más natural y responsable.
En Arrosi apostamos por soluciones que permiten:
- Reducir la huella ambiental del envase
- Sustituir progresivamente materiales plásticos
- Transmitir una imagen ecológica coherente con la marca
Esto ha impulsado la popularización de productos como el papel antigrasa con fibras vírgenes o el papel kraft termosellable. Puedes ampliar esta visión en nuestro contenido especializado: Papel Antigrasa: Soluciones para Alimentos y Más.
Compromiso de Arrosi con la seguridad alimentaria
En Arrosi diseñamos y fabricamos papel técnico con criterios de calidad, sostenibilidad y fiabilidad. Nuestra experiencia en el desarrollo de soluciones para la industria alimentaria nos permite acompañar a nuestros clientes en sus desafíos técnicos, normativos y logísticos.
Nos comprometemos con la trazabilidad de los materiales, el cumplimiento normativo y la personalización del producto, desde el diseño hasta la entrega. El papel para envolver alimentos de Arrosi es garantía de protección, imagen y rendimiento, y resulta especialmente demandado en el sector de la repostería por su capacidad para conservar texturas, evitar migraciones y aportar una presentación cuidada.